¿Tu método de selección de talento parece estar perdiendo candidatos de calidad chileno? En caso de que tu compañía no logra retener a los más talentosos profesionales, la causa puede estar en el corazón de tus procesos de selección.

A lo largo de un contexto laboral altamente competitivo como el chileno, muchas organizaciones no consideran fallos claves que acaban desmotivando al talento más preparado. Por eso, exploraremos qué está fallando y de qué manera consigues solucionar esta situación.
1. Falta de precisión en el puesto
Uno de los fallos más habituales es no definir claramente el puesto de trabajo. Numerosos procesos de selección no detallan competencias esenciales, lo que provoca que postulantes sumamente preparados no postulen.
Si el postulante no comprende en detalle cuál será su función, difícilmente se sentirá motivado. Un perfil estructurado transmite la cultura de la organización, y conquista a quienes comparten esa similar forma de trabajo.
Sistemas lentos y nada claros
El plazo cuenta. De acuerdo con informes actuales, cerca del 70% de los profesionales descartan búsquedas extensos o que carecen de comunicación.
Cuando tu empresa demora más de 10 días en avanzar a los postulantes, es altamente posible que los más demandados ya hayan aceptado otra oferta. Un proceso ágil, digitalizado y con feedback oportuna incrementa la satisfacción del postulante.
Falta de oferta atractiva
El talento chilenos priorizan con fuerza que el sueldo económico. Elementos como la flexibilidad, el lea sobre los errores de proceso de selección desarrollo continuo, o la filosofía de trabajo importan igual.
Si tu empresa no comunica de manera convincente sus ventajas, probablemente que deje escapar a profesionales destacados. Comunicar rutas de mentoring, políticas de inclusión, y incentivos tangibles posiciona una diferencia competitiva.
Entrevistas nada objetivas
Demasiadas empresas todavía dependen en percepciones subjetivas al elegir candidatos. Ese enfoque provoca errores costosos.
Adoptar evaluaciones estructuradas, dinámicas de grupo, o herramientas objetivas ayuda a valorar mejor a los profesionales, eliminando sesgos y optimizando la calidad del proceso.
Escasez de retroalimentación
El final del proyecto igualmente importa. Valorar el esfuerzo del candidato no seleccionado construye la imagen corporativa. Dejar la interacción posterior deteriora la conexión con la empresa.

Leave a Reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *